Te quiero.

Te odio y me odio. Te odio por dejarme. Me odio por no ser lo suficientemente fuerte para querer vivir sin ti.  Te odio por hacerte querer tanto, y me odio por hacerlo, por quererte y necesitarte en cantidades estratosféricas. Te odio por enseñarme lo bonito y maravilloso que era compartir mi vida contigo, lo bien que podía llegar a saber una cerveza cuando era compartida, por hacer que todo mereciese la pena. Me odio por saber que eso son solo recuerdos, que no se van a repetir,  por gustarme más la versión que tú tenias de mi,  por saber que se trata de historias que han llegado a su fin.

Te odio por no haber luchado, por no haberte quedado. Si en los libros y en las películas basta con que alguien lo pida llorando, suplicando, ¿por qué no fue suficiente? si nunca había deseado nada tanto. ¿Por qué no te pudiste quedar? ¿Por qué te tuviste que ir?, y sobre todo ¿Por qué te fuiste sin mi?

Comentarios

Entradas populares